Encorsetadas queridas:
No le veo mucho sentido al hablar de mi relación con la Escalera Nutricional y Dukan a volver a hablar de los mismos productos de los que ha hablado gente tan sabia como las bloggers que ya conocemos, repetir lo mismo no va conmigo.
Por eso vengo a presentaros uno de los productos que estoy usando para la dieta y que ya consumía antes de seguir este plan de adelgazamiento.
Se trata de un producto presentado en un envase similar a una pasta de dientes, básicamente es tomate en pasta. Es como si hubieran cogido tomates secos, les hubieran quitado las pepitas y la piel y se hubiera quedado solo la carne.
A nivel nutricional, por 100 gramos de producto hay 17 de hidratos. Esto puede parecer una barbaridad pero estamos hablando de un producto concentrado y comerse 100 gr consiste, ni más ni menos, que en cascarse medio tubo de tomate. Así que tranki, tronquis.
En casa le damos mucho uso, y por lo que he podido investigar por la red, no estamos solos. y siempre tengo uno abierto en la nevera y otro en la despensa por si acaso. No es que te saque de muchos apuros, pero antes de conocer este producto era frecuente empezar un bote de tomate en conserva y tener que guardar parte del mismo porque era demasiada cantidad.
El precio es económico, 99 céntimos (precio vigente cuando redacto este post) y el producto se conserva perfectamente durante 4 semanas una vez abierto en la nevera. Antes de consumirlo se puede mantener en la despensa a temperatura ambiente. También genera menos basura que comprar tomate en conserva de bote o tomates frescos y luego rallarlos para cocinar.
El producto solo lleva tomate y sal. Y nada más. Por eso, tiene la acidez natural del tomate y has de tenerlo en cuenta, al igual que sucede que el contenido de sal, según en qué circunstancias y con qué otro producto lo vayas a consumir.
¿Cómo lo uso?
- Tal cual:- Está bueno untado, encima de un poquito de pan, o en un canapé con otro producto que te guste, o encima de un huevo duro partido por la mitad. Eso sí, en pequeña medida por lo intenso del sabor, la sal y la acidez.
- Hidratado.- Ponemos la pasta de tomate en un recipiente y le añadimos agua al gusto mientras removemos.
- Una vez hidratado se puede tomar como zumo, añadiéndole un poco de azúcar o bicarbonato para quitar la acidez.
- Una vez hidratado, en menor mesura que en el caso anterior para zumo, le puedes añadir un poquito de aceite de oliva y elaborar una mezcla más bien fluida que te aseguro queda exquisita para añadir sobre una tostada a modo de "pà amb tomaca".
- Una vez hidratado, se puede usar para elaborar sofritos o rehogados del mismo modo que lo harías con tomate rallado o el que se comercializa en bote rectificando la acidez con azúcar o bicarbonato si así lo deseas.
