MOTIVOS PARA COMPRARSE UN CORSET VICTORIANO (II). MEJORAR LA POSTURA Y LA SALUD DE LA ESPALDA.

Este fue mi primer corset.

¿Seguís por aquí?  ¡Gracias por leerme!


Cuando, como comentaba en el primer "motivo" son varias las utilidades que un buen corset como por ejemplo los que venden en esta tienda donde he adquirido los que tengo puede ofrecer.  Obviamente todas estas ventajas y motivos que os expongo sobre el uso del corset vienen cuando se usa uno de calidad, no vale ni por asomo estos corsets baratos de lencería, que son muy bonitos, pero NO TIENEN ESTE POTENCIAL DE UTILIDAD.

Soy una mujer con un escote muy generoso para los demás pero muy destructivo para mi espalda.  Tenéis que pensar que los pechos grandes para unas cervicales de mujer es como llevar constantemente una mochila en la parte delantera del tronco, y eso, queridos, pasa factura en forma de dolor y lesiones.  

Por otro lado, las mujeres como yo solemos encorvar la espalda por el peso, aunque también a veces sobre todo de adolescentes y jóvenes, encorvamos la espalda para ocultar tan rotunda anatomía.  
A las chicas con el pecho grande en el colegio les pasa exactamente igual que a los chicos gorditos, con gafas... en definitiva, siempre hay acosadores dispuestos a cebarse con las diferencias.  Aunque todo sea dicho, luego te enteras de que algunas de las que se metían contigo por tener tantas tetas se han operado el pecho o fueron de las primeras en comprarse el Wonderbra.  Perro mundo...

Sabéis que en España la Seguridad Social cubre la cirugía de reducción de senos en algunos casos extremos, pero el hecho de que no lo cubra para todas las que estamos tan dotadas no quiere decir que no nos iría bien.

Pues bien, yo hace años hago ejercicios con pesas en busca de alivio para esa parte de mi cuerpo, porque si el músculo del pecho está fuerte y la espalda también, los problemas son menos.   Y me va bien, pero ellas dos siguen ahí tan importantes como siempre y eso se nota.  Sueño desde hace tiempo con que inventen una especie de venda que pegue los pechos al cuerpo, reduciéndolos visualmente y sobre todo, evitando tener que cargar todo ese peso en los tirantes del sujetador.

Valga todo el rollo de arriba como introducción, paso a contaros en qué medida un corset puede ser un buen amigo para las chicas pechugonas.

Investigando en internet sobre los corsets descubrí que para muchas chicas de mi misma envergadura pectoral, era un alivio ponérselo.  Para explicarlo fácil, el corset funciona como una estructura rígida, levantando el pecho desde abajo, como si fuera un andamio, descansando así la zona de los hombros del peso del tirante del sujetador.  Para mí, leer algo así fue definitivo, no es que quisiera uno, es que lo necesitaba.  Estamos hablando de los corsets "overbust" osea, aquellos que cubren todo el tronco desde el pecho.  

Y fui a por él.  Me decidí por este modelo en negro.  Para elegirlo tuve que tener en cuenta una serie de aspectos que narraré en otro post para que sirvan de ayuda a quien pueda verse en la necesidad. (talla, modelo de escote...etc)

Características:

•  tiene varillas de acero, faja de acero inoxodable,  ambas cosas importantísimas, 
• el forro interior es de algodón, para que respete tu piel, 
• Tiene una cosa que se llama panel modesto, que no es otra cosa que una parte de tela que queda debajo de la cuerda para que cuando se ate no se vea la piel o lo que lleves debajo y quede más elegante y a la vez que la cuerda no se clave en tu piel.  Normalmente esta pieza no aparece en los corsets de gama baja o económicos más tipo lencería.
• Tiene un cordón fuerte, que sirve para poder hacer presión a la hora de atarlo.  Verás seguramente por la red otros corsets que en vez de cordón llevan como una tira de tela de seda o viscosa, que claro , es más decorativo que otra cosa y por ese motivo nunca te va a ceñir igual que un corset de este tipo.
• El potencial de reducción de cintura es de 10-13 cm.  Depende siempre de lo que te lo quieras apretar y eso debes hacerlo siempre con la cabeza, si te lo aprietas más de lo que debes, tu cuerpo lo notará y te tocará aflojártelo.  Los corsets son preciosos, pero tu salud lo es mas.
• El corset mide 37 cm de largo.
• El busto tiene forma de corazón aunque sinceramente fue un error por mi parte y debería haberlo elegido con el escote recto que favorece bastante más a las chicas con tanto pecho.

Intenté ponérmelo pero tenía que pedir ayuda a mi pareja para abrochármelo (si os vais a comprar alguno tenedlo en cuenta para que no os pase lo mismo) , ya que aunque el corset tenía muy buena calidad, las cuerdas que llevaba eran cortas y no me las podía atar yo misma y por eso dejé de usarlo.  Él no para mucho por casa así que tenía que depender de él.

Ese corsé es una maravilla.  Cubre desde el pecho hasta la cintura y ponérmelo supone prescindir del sujetador y darle un gran alivio para la espalda.  Me lo ponía para ir a la oficina debajo de la ropa y para alguna cena especial ya que a la hora de elegirlo tuve en cuenta que me apetecía comprarme algo que pudiera usar para vestir y como ropa interior. Cuando llegaba a casa y me lo quitaba tenía la espalda como nueva, me había descansado.  Los primeros dias de ponérmelo era como si hubiera crecido, os parecerá una locura, pero realmente es así.  El ir más recta, te hace ganar unos cm y no os creáis, ¡que me costó acostumbrarme!

Uno de los corsets underbust que compré en julio

Otro de los corsets underbust que compré en julio

Con el tiempo cogí peso, y dejó de venirme.  A principios de verano ví el famoso vídeo de Rocio LAura y otro de una chica también latina que se llama Corsetti adquirí otros dos corset underbust (como los de los vídeos, que no cubren el pecho) que son los que he estado usando actualmente. Y aunque como os acabo de decir,  no cubren la zona del pecho, también me alivian la espalda,  porque las ballenas de acero me obligan a ir recta y mi postura ha mejorado notablemente.  Me resultan cómodos de quitar y poner porque la cuerda es larga y la puedo atar yo misma sin ninguna dificultad.  También me resultan más cómodos a la hora de hacer faena en casa, ya que al no ser tan altos como mi primer corset,  me puedo doblar mejor que si llevara uno como el primero que me compré.  Y no ha habido día en el que no me los haya puesto, y ninguno, insisto, ninguno de esos días me he ahogado, he tenido dolores raros... nada de nada.  

A día de hoy estoy a punto de ponerlos a la venta porque me han quedado grandes. Actualmente, gracias a todas esas cosas que os estoy contando en el blog sí me puedo poner el corset antiguo, el de la primera foto, ya que entre lo que estoy perdiendo de cintura y que le he cambiado el cordón y le he puesto otro más largo por lo que me lo puedo ceñir yo solita.  Lo que hago es ponermelo cuando me voy a sentar aquí en el ordenador a contaros cosas o a trabajar, aprovechando esas horas delante de la pantalla para corregir postura, descansar del sujetador y  de paso, reducir cintura.

Y bueno, ese es el segundo motivo (y los que me quedan) por el que yo os recomendaría, basándome únicamente en mi experiencia personal, que os hagaís con un corset.  Perdonad el atrevimiento, pero sí, te aconsejos el corset si te gusta y si tienes problemas de postura de espalda, a mí, por lo menos, me sale más barato que ir a un fisioterapeuta.